Honestly, I wasn't expecting a second season. I haven't heard anyone talk about Tsurune (at least in the Spanish-speaking world). But I'm very glad they decided to do it. I really enjoyed the first season and this became one of my comfort animes, so I really liked the idea of a second one.
However, I didn't expect to like it so much. I liked it much more than the first.
In the review of the first season, I mentioned that the rest of the characters, besides Minato, Seiya and Masaki, didn't have much development, but this second season developed the rest of the cast. And it do it very well. Episodes five and seven were my favorites of the entire series (counting both seasons).
In the first season, I liked Ryohei and Kaito, but I didn't like Nanao. Anyway, I didn't love any of them. Now I do. Chapter five focuses Kaito and Nanao and their relationship, which is many years and very complex. Even though I couldn't stand Nanao before, after this chapter, I learned to love him because I was able to understand him better. Chapter seven focuses on Ryohei and Shu, and the friendship that arises between the two delighted and surprised me equally. I never would have imagined that the two could end up being friends. Having opposite lives and personalities, they both complement each other very well and became my favorite duo within the series.
The Kazenmai club girls (Seo, Shiragiku and Hanazawa) get a lot more screen time and I love that. As I mentioned in the review of the first season, I like that they aren't just a setpiece behind the male leads, but that they also have their moments to shine, their own personalities, goals and problems. We have a whole episode dedicated to them and I really enjoyed it.
Other members of Kirasaki are also developed a bit more.
My problem with the series (because there had to be one) is the "rivals", the Tsujimine club. At first they are presented to us as a team to be feared and, as is typical of KyoAni, then we are taken into their club and introduced to normal guys with their own personalities and desires. I liked that aspect, because I like rivals that have soul and aren't mere rivals. The problem is that I expected them to develop a lot more and the ending fell a bit flat. Like: this happened and that's it. They seemed to me more like an excuse to generate new challenges for Kazenmai and nothing more. And that's really a rival, but I was liking the pace and the importance that the series was giving them, it seemed like something else was going to happen, and suddenly it was all over. Anyway, I really liked all the members of Tsujimine, especially Nikaido and Koushirou, although they all had very different personalities and designs from each other.
Because there are so many characters to develop, the series forgets a bit about Minato, Seiya and Masaki, but considering the previous season was about them, it doesn't bother me (aside from the fact that I don't like Minato).
I highly recommend watching it! Honestly, I think it's better than the previous one.
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Sinceramente, no me esperaba una segunda temporada. No he escuchado a nadie hablar de Tsurune (al menos en el ámbito hispanohablante). Pero me alegro mucho de que hayan decidido hacerla. Disfruté mucho de la primera temporada y esta se convirtió en uno de mis animes de comfort, así que la idea de una segunda temporada me gustaba mucho.
Sin embargo, no esperaba que me gustara tanto. Me gustó mucho más que la primera.
En la reseña de la primera temporada, mencioné de que el resto de personajes, además de Minato, Seiya y Masaki, no tenían mucho desarrollo, pero esta segunda temporada se encarga de desarrollar al resto del elenco. Y lo hacen muy bien. Los episodios cinco y siete fueron mis favoritos de toda la serie (contando ambas temporadas).
En la primera temporada, Ryohei y Kaito me gustaron, pero Nanao no. De todas formas, no amé a ninguno. Ahora sí. El capítulo cinco se encarga de desarrollar a Kaito y Nanao y a su relación, que tiene muchos años y complejidad. Si bien antes no soportaba a Nanao, después de este capítulo, aprendí a quererlo porque pude entenderlo mejor. El capítulo siete se centra en Ryohei y en Shu, y la amistad que nace entre ambos me encantó y me sorprendió a partes iguales. Nunca hubiese imaginado que ambos podrían terminar siendo amigos. Teniendo vidas y personalidades opuestas, ambos se complementan muy bien y se volvieron mi dúo favorito dentro de la serie.
Las chicas del club de Kazenmai (Seo, Shiragiku y Hanazawa) tienen mucho más tiempo en pantalla y eso me encanta. Como mencioné en la reseña de la primera temporada, me gusta que no sean sólo un decorado detrás de los protagonistas masculinos, sino que también tengan sus momentos para brillar, sus propias personalidades, metas y problemas. Tenemos un episodio entero dedicado a ellas y lo disfruté mucho.
También se desarrollan un poco más otros miembros de Kirasaki.
Mi problema con la serie (porque tenía que existir uno) son los "rivales", el club Tsujimine. Al principio se nos presentan como un equipo a temer y, como es propio de KyoAni, después se nos adentra en su club y se nos presentan a muchachos normales con sus propias personalidades y deseos. Ese aspecto me gustó, porque me gustan los rivales que tienen alma y no son meros rivales. El problema es que esperaba que se desarrollaran mucho más y el final quedó un poco en la nada. Como: pasó esto y ya está. Me parecieron más una excusa para generar nuevos retos para Kazenmai y nada más. Y eso son los rivales en realidad, pero me estaba gustando el ritmo y la importancia que la serie les estaba dando, parecía que iba a pasar algo más, y de pronto todo terminó. De todas formas, todos los miembros de Tsujimine me gustaron mucho, sobre todo Nikaido y Koushirou, aunque todos tenían personalidades y diseños muy diferentes entre sí.
Debido a que hay tantos personajes por desarrollar, la serie se olvida un poco de Minato, Seiya y Masaki, pero, teniendo en cuenta de que la temporada anterior se trató sobre ellos, no me molesta (aparte de que Minato no me gusta).
¡Recomiendo mucho verla! Sinceramente, pienso que es mejor que la anterior.
